Evento de Tailandia celebró veinte años de la Red Global Adventista de Internet (GAiN). 15 de julio de 2024 | Chiang Mai, Tailandia | Felipe Lemos, División Sudamericana, y Adventist Review Los desafíos comunicacionales de una iglesia mundial son proporcionalmente gigantescos. Durante dos décadas, los adventistas han estado analizando maneras de comunicar efectivamente el mensaje bíblico de salvación a diversas audiencias con características culturales extremadamente diversas. El encuentro mundial llamado GAiN, un acrónimo para designar a la Red Global Adventista de Internet, es una reunión de la red mundial de comunicadores, que se enfoca especialmente en la acción de evangelización en el ambiente digital. El encuentro reúne a profesionales de una diversidad de categorías de comunicación que trabajan directa o indirectamente en proyectos de comunicación institucionales o no institucionales. El evento ya ha sido organizado por países y regiones como Jamaica, los Estados Unidos, Hong Kong, Corea del Sur y Brasil, y su vigésimo encuentro, en 2024, se llevó a cabo del 10-13 de julio en la ciudad de Chiang Mai, en el norte de Tailandia. La cumbre del vigésimo aniversario de GAiN en Tailandia contó con momentos de reflexión sobre medidas estratégicas adoptadas en varias regiones del mundo para compartir el evangelio. [Fotografía: cortesía de la División de Asia-Pacífico Sur] El inmenso foro hizo que sus 550 participantes tuvieran conocimiento de dos dimensiones muy claras. Una de ellas es la producción de filmes, series y otros productos cinematográficos en el contexto del evangelismo. Se dio énfasis a la necesidad de incrementar la producción de contenidos para alcanzar a aquellos que quieren saber más de la Biblia. GAiN también ofreció inspiración en relación con proyectos misioneros, en especial los que se llevan a cabo en Asia. Muchas de esas iniciativas usan la tecnología digital para mejorar los resultados. Un desafío llamado Asia Asia es un inmenso continente en el que el cristianismo es una religión minoritaria y el adventismo se encuentra en su infancia. Aun así, los esfuerzos misioneros de la iglesia se están incrementando en intensidad y frecuencia. La religiosidad en el Sudeste Asiático, que es mayormente budista, es considerada una barrera natural para el progreso de iniciativas cristianas. Lo que está claro es las típicas producciones de comunicación de los cristianos necesitan ser añadidas al trabajo de la comunicación basado en las relaciones interpersonales. El director del Centro de Religiones de Asia Oriental en la Asociación General de la Iglesia Adventista (GC), Khamsay Phetchareun, explicó que los sistemas de creencias como es el caso del budismo poseen una perspectiva totalmente divergente del cristianismo en lo que respecta a su concepción de Dios, el sufrimiento humano, y aun los rituales de fe. En su evaluación, un nuevo miembro adventista que provenga de ese trasfondo religiosa necesita por lo tanto ser recibido mucho mejor, porque cuando esa persona cambia de religión, llegan literalmente a ser parte de una nueva familia. Equipo de voluntarios que trabaja en proyectos de evangelización digital en las Filipinas. [Fotografía: cortesía de la División de Asia-Pacífico Sur] Comunicación eficiente En las Filipinas, la Iglesia Adventista del Séptimo Día mantiene un centro de evangelismo en línea. En el presente, 42 misioneros jóvenes de entre 20 y 25 años, que representan a veinte países diferentes, enseñan la Biblia y ayudan a las personas interesadas en saber más de Dios según lo revelan los adventistas. El director del centro, Elexis Mercado, dijo que cada mes, se envían unas cincuenta Biblias a la gente, la mayoría de las cuales vive en países de Asia. Entre enero y julio de 2024, al menos 16 personas fueron bautizadas mediante la influencia directa de esta obra. En la práctica, esos misioneros suelen trabajar en el proyecto durante un año, dirigir las oraciones, el diálogo, y los cursos bíblicos para personas que llegan a ellos mediante el contacto con el contenido generado y diseminado en las redes sociales. En Corea del Sur, un experimento con avisos pagos en los medios sociales busca atraer a las personas para aprender más de los adventistas y sus enseñanzas. Seung Cheon Ji es el director de comunicación y evangelismo digital en la sede administrativa de Gwangju, a tres horas de Seúl, la capital del país. Destacó que el proyecto piloto comenzó hace poco más de un mes en cuatro congregaciones. Según Ji, en una iglesia, las campañas digitales ofrecieron oraciones por las personas por medio de Facebook e Instagram. El alcance de los avisos en solo una iglesia y durante más de treinta días fue de más de 63 mil personas en un radio de cinco kilómetros de la congregación. De esas personas, 101 respondieron, y un total de cuarenta fueron catalogados como los contactos más prometedores. De entre los cuarenta más interesados, solo un poco más del sesenta por ciento mantuvo algún tipo de participación como resultado de los pedidos de oración. El veinte por ciento, sin embargo, respondió de manera activa, y aun mostró interés en asistir a un culto de una congregación adventista. Varias iniciativas en diversas partes del mundo están haciendo uso de contenidos audiovisuales para llevar a las personas al conocimiento de la Biblia. [Fotografía: cortesía de la División de Asia-Pacífico Sur] Más al sur, en la India, los medios sociales también han llegado a ser un canal importante a la hora de esparcir la esperanza bíblica. El director de comunicación de la sede adventista en la región, Ramesh Jadhav, mencionó el uso de redes sociales como Facebook y otros sistemas (WhatsApp, YouTube, y aun los mensajes de textos tradicionales) para llevar el mensaje bíblico a las personas de una región de 18 dialectos e idiomas diferentes. “Nuestro trabajo es constante, y mantenemos una conexión con los pastores locales para visitar a las personas que contactamos en línea”, dijo Jadhav. La capacitación de futuros comunicadores y especialistas en tecnología también representa una preocupación. Durante el evento, el director de educación de la Iglesia Adventista en Mongolia, Joanne Myoung Kim, presentó planes de construir una institución educativa internacional para hasta doscientos estudiantes en